Texto por: Tania López.

El pasado fin de semana, Valparaíso se llenó de historia, cultura y gastronomía con la primera versión de “Que vuelvan los salones de ostras”, una iniciativa impulsada por la Fundación Cocinamar y Valparaíso Creativo en el marco de su Comité Gestor, y con el apoyo de 16 organizaciones. Este evento, que buscó revivir una tradición porteña casi olvidada, invitó a la comunidad a disfrutar de la mejor selección de ostras en distintos puntos de la ciudad, combinando cine, gastronomía y disfrute.

El viernes 31 de enero, la jornada inaugural tuvo lugar en Insomnia Teatro Condell con la proyección de la película “Délicieux” (2021), de Eric Besnard, un filme que explora los orígenes -desde la ficción- de la gastronomía moderna, inspirada en los albores de la Revolución Francesa. Una exhibición que sirvió de apronte para adentrarnos en las conexiones entre la cocina, la historia y la cultura local a partir de esta ruta de degustaciones. La experiencia continuó en el frontis del teatro con una degustación de ostras frescas, gracias a la colaboración de Pescadería Móvil Tres Peces y la Fundación Cocina Mar, acompañada de una selección de espumantes y vinos.

La gestión de esta idea y posterior organización, tiene su origen. Meyling Tang, socia de Tres Peces Valparaíso, vicepresidenta de Fundación Cocinamar y una de las organizadoras de este evento, comentó que este interés surge con la necesidad que se vuelva a disfrutar de estos moluscos en la ciudad. “Vimos un aviso en el diario, de 1854, que enunciaba a estos salones de ostras y este disfrute. Estas ostras venían desde Ancud hasta Valparaíso y eran muy apetecidas (…) entre todas las organizaciones participantes nos interesa volver a vivir ese patrimonio, pero que los restaurantes tengan productos del mar con origen legal, con historia, para poder disfrutar de las riquezas del mar chileno”.

Esta travesía continuó el sábado 1 de febrero, donde  la experiencia gastronómica se extendió a tres nuevos espacios: el Restaurante Rosmarino, Café Casaplan y Espacio Prat, ubicado en el segundo piso del histórico restaurante Capri. Cada uno de estos lugares aportó su propia esencia a la degustación, ofreciendo combinaciones únicas de ostras y maridajes especiales.

“Esta actividad nos pone en mayor contacto con nuestros clientes, nuestros vecinos del cerro y nos invita a darle mayor publicidad y activación a Valparaíso y al cerro Concepción en particular”, comentó Cristián Gomez, uno de los socios del restaurante Rosmarino.

Con una degustación de ostras inspirada en Francia, la cafetería y espacio de arte Casaplan, tomó la posta a eso de las 16.30 horas, convocando a una treintena de personas a la  experiencia. Allí, Carla Díaz, una de sus asistentes, contó a Valparaíso Creativo que “es maravilloso poder disfrutar de un evento como este en Valparaíso. La combinación de cine, conversación y gastronomía ayer, y que hoy nos deleite con otras formas de probar estas ostras, nos hace que sea una experiencia muy enriquecedora”.

Para quienes no pudieron asistir, la buena noticia es que “Que vuelvan los salones de ostras” continuará el primer fin de semana de marzo con nuevas fechas en el Museo Baburizza en marzo. La invitación está abierta para seguir redescubriendo esta tradición y disfrutar de una experiencia única en la ciudad puerto.