Siniestra Pandora es una banda de músicos de Valparaíso que proponen sonidos melancólicos, oníricos. Recientemente lanzaron su último trabajo, “Elegía”, reúne un cuerpo de canciones entrelazadas por la sensación de duelo en sus letras y melodías nostálgicas.
Nos reunimos en el Hub Creativo, donde anteriormente realizaron el Listening party de “Elegía”, para conversar sobre su música, su estilo y su conexión con la ciudad puerto.
Partamos por lo esencial: ¿qué es el heavy shoegaze?
– Es una mezcla de estilos que surge principalmente en los años 90. El shoegaze emergió paralelamente al grunge, que tuvo más impacto comercial, dejando al shoegaze en segundo plano. Aunque no fue tan influyente en su momento, bandas como My Bloody Valentine y Slowdive son emblemáticas del género. Cerca de 2010, se empezó a escuchar una mezcla de estos sonidos. Combinando la distorsión y el peso de bandas como Nirvana y Smashing Pumpkins, con los efectos atmosféricos y oníricos del shoegaze. Después de 2012, se popularizó el término heavy shoegaze o post shoegaze, que describe esta fusión de estilos.
¿Tienen referentes locales de la historia de la música nacional?.
– Quizás no tan directamente, Lucybell creo que es una de las primeras bandas que experimentan en este sentido, su disco Rojo encuentro que se parece bastante a lo que hacemos. Quizás ellos son más post-rock, pero también tiene esta volada onírica y lenta que nosotros agarramos un poco.
Los Niños del Cerro, si bien no nos influencian directamente, generan un ruido que me atrae. De hecho hay una canción en la que agarramos el beat de un tema de Lucybell y lo transformamos en un tema de nosotros. Así que sí, es una influencia directa. Adelaida es otra banda local que nos ha influenciado y es de acá de Valparaíso. Creo que nosotros llegamos al sonido que tenemos y después nos fuimos dando cuenta de que, mira, esto se parece a tal. Todos escuchan música muy distinta, entonces es raro decir una influencia tan directa.
¿Actualmente viven de la música o están en vías de? Sin duda es un gran desafío.
– Hay de todo un poco, porque claro, hay algunos de nosotros que aún estamos estudiando, por lo que aún tienen el apoyo de sus familias. mientras que otros tienen trabajos no vinculados a la música, como en una cafetería. Hay quienes se dedican totalmente a esto (como Tristán), aunque aún no generamos ingresos suficientes. Organizar y lleva adelante el proyecto es un desafío, pero también esperamos que en algún momento esto nos permita sustentarnos. Sabemos que es difícil vivir de esto, pero todo suma: recursos económicos, favores y contactos, para impulsar nuestra carrera. Esperamos que esto se solidifique cada vez más y podamos vivir de la música.
Este disco, “Elegía”, toca el duelo por situaciones personales. ¿Cómo describirían ese duelo?
El disco “Elegía” aborda diferentes pérdidas, comenzando con la muerte de un familiar muy cercano de Tristán, lo que inspiró las letras. Además las canciones hablan de la sensación de pérdida, de la ruptura de relaciones y amistades, encapsulando la sensación de pérdida, en un sentido positivo y negativo. Todo porque además se estaban cortando ciertos vínculos en nuestro entorno, lo que termina siendo a veces para bien, otras para mal. La grabación coincidió con estas experiencias personales, lo que conectó todo el proceso con un cambio interior y luego miras afuera y en la ciudad no cambia nada. No hay tanto tiempo para procesar el luto, de eso es lo que habla el disco.
También, cuando empezamos a tocar juntos, empezaron a salir nuevos sonidos, conectándonos a algo más personal, generando cierta complicidad, apertura a hablar de estos temas y afrontarlo de alguna manera.
¿Cómo se relacionan con el gremio de la música desde Valparaíso?
Contamos con el apoyo de nuestras familias, ahí empieza todo. También están las redes que hemos ido construyendo a través del Sello Leviatán, que es de Valparaíso y del cual somos parte junto a otras bandas locales con las cuales colaboramos. cada uno aporta con lo que tiene, y así vamos a poder construir algo que nos beneficie a todos. Porque al final creo que todos entendemos que la colaboración es importante. La exposición no solo me sirve a mí, sino que también a mis colegas, todos ganamos.
Recientemente postulamos para una gira, nunca habíamos hecho un presupuesto de gira y nos dimos cuenta que es hiper inalcanzable, ya que somos cinco, necesitamos como cinco millones, y eso es imposible con los trabajos que tenemos. Entonces, es muy valioso que en el colectivo nos apoyemos, ofreciendo conocimientos y generando instancias como festivales o encuentros donde tienes la oportunidad de construir conexiones con otras bandas.
Finalmente, ¿qué imágenes quieren evocar con su música? Más allá de la emoción, hablando del sonido.
Nuestra música busca evocar un mundo onírico y una melancolía ruidosa, transitando entre la energía potente y la emocionalidad, creando una mezcla única entre ambos extremos.